Nuestra historia
La Asociación Puntos inició operaciones en el año 2021. Retoma una trayectoria de 30 años de trabajo en la región centroamericana impulsado entre 1991 a 2022 por la Fundación Puntos de Encuentro, con sede en Nicaragua.
La Asociación Puntos de Encuentro es una nueva organización que se basa en los mismos principios fundacionales y marco conceptual de la Fundación. Desde sus inicios, la Asociación plantea una dinámica de evolución, adaptación, e innovación en nuevos contextos.
Ver los programas más destacados de la Fundación desde 1991 hasta 2022.
Puntos de partida
Transformar las relaciones
desiguales de poder
Para lograr la sociedad que queremos, las aspiraciones no son suficientes. Las relaciones desiguales de poder que mantienen el autoritarismo, la violencia, la discriminación y la exclusión no se cambian por sí solas.
En la casa, la cama
y la calle
Para avanzar en los valores y prácticas democráticas y de equidad y respeto mutuo en la casa, la cama y la calle, se requiere de cambios en varios ámbitos y niveles: en las normas sociales y la cultura popular, así como en las relaciones interpersonales y familiares, en la comunidad y las instituciones, las políticas y en la cultura política.
El cambio comienza con las
personas
Enfocamos el trabajo principalmente en personas que promueven estos cambios: Activistas y líderes que trabajan en sus comunidades, en organizaciones, instituciones y medios de comunicación, así como en movimientos sociales que luchan por los derechos de las mujeres de todas las edades, personas LGBTIQ+, y la comunidad migrante centroamericana.
La acción colectiva
es clave
Mientras las personas son la fuerza motora para estos cambios, los cambios no se logran sólo con el esfuerzo individual. Se necesita de acciones colectivas y comunitarias, y de grupos y organizaciones que se articulan en movimientos sociales para demandar y construir los cambios deseados.
Aporte social de Puntos
Qué hacemos y cómo lo hacemos
Con personas activistas y líderes, así como con organizaciones y movimientos con quienes trabajamos a nivel local y regional, combinamos cuatro tipos de procesos interrelacionados y complementarios, estos son:
- Formación y fortalecimiento de capacidades.
- Comunicación para el cambio social.
- Alianzas y articulaciones.
- Investigación, aprendizaje, innovación.
En cada uno abordamos los temas, contenidos, enfoques y prácticas mencionados arriba desde diferentes ángulos.
Nuestro trabajo se desarrolla a nivel presencial y en modalidades virtuales. El trabajo presencial se desarrolla en Nicaragua, Guatemala, El Salvador, Honduras y Costa Rica, con participantes de estos países además de migrantes de varios otros países. El trabajo virtual se extiende más allá que la región centroamericana.
Nuestros procesos de capacitación y formación se enfocan en temáticas, metodologías y abordajes relevantes para el fortalecimiento de las organizaciones y movimientos sociales.
Queremos que las personas participantes –como activistas y líderes– desarrollen su potencial y capacidades individuales y colectivas para transformar sus propias vidas, sus grupos, organizaciones y movimientos en los que participan, y los otros entornos en los que se desenvuelven. A partir de los procesos, las personas participantes construyen propuestas, planes, y agendas dirigidas a lograr los cambios y objetivos que se han planteado.
Tanto en los procesos presenciales como en los virtuales, combinamos lo vivencial, lo teórico y las prácticas individuales y colectivas, promoviendo siempre el intercambio e interlocución entre participantes. Casi todos estos procesos también incluyen componentes de comunicación para el cambio social, alianzas y articulación, y aprendizaje que complementan y refuerzan l trabajo de capacitación y formación.
Valoramos la opinión pública como crucial para el cambio social. Los medios de comunicación son vitales, pero la comunicación va más allá de los medios. Es un proceso de diálogo y de encuentro de ideas, imaginarios, realidades y voces diversas, que puede lograr conectar a la gente a través de la distancia, crear comunidad, y promover un sentido de pertenencia a movimientos sociales, más allá que la lectura, escucha y vista individual.
En el contexto actual de extrema polarización política, desde Puntos usamos diferentes formatos de comunicación para tejer puentes y facilitar información y narrativas que apoyan a las personas en sus vidas personales y sociales, así como en sus vidas como activistas. Todo esto aporta a entornos favorables para el cambio social que estamos buscando.
Estamos conscientes que términos como «derechos humanos», «ciudadanía», “enfoque de género” pueden sonar técnicos y pueden impedir que la gente –incluyendo a activistas– se apropien y perciban su relevancia en la vida cotidiana. Por eso, en nuestros productos de comunicación, buscamos definir y “traducir” ideas y análisis complejos a lenguaje sencillo y directo para facilitar que las personas puedan formar y expresar sus perspectivas sobre asuntos que afectan sus vidas.
Producimos nuestros propios medios de comunicación para llegar a los distintos grupos con que trabajamos. También impulsamos procesos de capacitación y articulación de comunicadores jóvenes y feministas a nivel regional para alcanzar mayor cobertura desde una perspectiva de equidad y derechos.
La acción colectiva es pilar clave para el cambio social y para alcanzar la justicia y la equidad en nuestras sociedades, es crucial unir fuerzas en movimientos sociales. Es así que en todo nuestro trabajo promovemos alianzas, articulaciones, sentido de pertenencia y acción colectiva.
Llegar a consenso entre grupos diversos siempre es un reto, la colaboración comienza con tender puentes y propiciar el diálogo e intercambio para conocer las experiencias, perspectivas y aspiraciones de cada uno. Así se puede llegar a un nivel de entendimiento suficiente para construir agendas de interés común y realizar acciones colectivas a nivel local, nacional, regional e internacional, siempre respetando la autonomía de cada organización.
Nuestros países han sido plagados por estructuras autoritarias y excluyentes por cientos de años, lo que desafortunadamente también se refleja en organizaciones feministas y progresistas. Por eso, promovemos formas organizativas democráticas, priorizando también el buen trato interpersonal y organizativo, el respeto mutuo, la no discriminación, y la libertad para expresar ideas y opiniones diversas y diferentes.
Las alianzas y articulaciones van de la mano con el trabajo de formación y capacitación que busca fortalecer activismo y liderazgos con valores y comportamientos que fomentan la inclusión, equidad y respeto a la autonomía de personas, grupos u organizaciones.
A la par, fomentamos diálogos entre generaciones y entre personas con identidades distintas y de diversas condiciones sociales, para lograr la construcción de alianzas y articulaciones entre diferentes tipos de grupos y comunidades.
Nos definimos como una organización en constante aprendizaje para asegurar la mejora continua en la calidad e impacto de nuestro trabajo.
Nos actualizamos continuamente en el estado del arte en los temas y enfoques en los que estamos trabajando. Participamos en espacios de debate y discusión, donde compartimos experiencias y evidencias surgidas de la práctica.
Antes, durante y después de nuestras iniciativas, indagamos con las personas con las que trabajamos para asegurar que el diseño de proyectos, productos y demás estén sintonizados con las necesidades e intereses de los grupos con los que trabajamos.
Además de conocer el impacto y valoración de nuestro trabajo, nos interesa entender qué funciona, qué no funciona, y por qué. Por eso nos interesa tanto los aspectos cuantitativos como cualitativos, así como la valoración y eficacia de las metodologías empleadas. Queremos entender cómo suceden los cambios y la relación entre el cambio individual y el cambio colectivo y social.
Recursos
DKY es un medio digital que ofrece contenido educativo y entretenido, mostrando historias y realidades de Centroamérica para jóvenes urbanos de 18 a 35 años. A través de su contenido audiovisual, invita a los espectadores a reflexionar sobre temas relevantes de la región, como derechos sexuales, diversidad sexual, migraciones y violencia de género, entre otros.
Una revista digital centroamericana que aporta a la comunicación e intercambio entre activistas de organizaciones y movimientos de mujeres, feministas y LGBTIQ+ de la región, con artículos e historias que reflejan y apoyan sus luchas.
Esta aplicación para teléfonos celulares fue creada a partir de necesidades detectadas durante los procesos de capacitación con migrantes. Beneficia a cientos de personas defensoras de derechos y activistas que por diversas razones tuvieron que emigrar a otros países, incluyendo Costa Rica, España, Guatemala, Estados Unidos, México y Panamá.
El programa de capacitación «Mi escuela, un lugar seguro» para la prevención de violencia sexual y prevención de suicidio en centros educativos incluye capacitación de personal docente y estudiantes para utilizar el poder de la palabra contada a través de historias, relatos, ficción y dramatización para compartir experiencias, generar aprendizajes y promover reflexión como herramientas de empoderamiento.